En este estado quedó la unidad móvil de ABC Punto Radio tras la manifestación convocada por los sindicatos en Madrid. Le arrancaron el logotipo del periódico, pegaron pegatinas pro huelga y le acabaron pinchando una rueda. Todo mientras nuestros compañeros, periodistas y técnicos, estaban trabajando en la Puerta del Sol, donde acabó la marcha.
Hasta cierto punto es comprensible la frustración sindical. Lo digo porque el jueves aparqué en el parking de siempre, desayuné en mi bar habitual, hice cuatro compras en el super de mi barrio, llevé la ropa a la tintorería, merendé en mi pastelería de cabecera y me fui de tapeo a la esquina de mi casa. Como un jueves cualquiera. En efecto, desde el punto de vista sindical, lo que acabo de contar debe de ser cabreante.
Mi más absoluto respeto para los que ejercieron su derecho de huelga como para los que fueron a trabajar. Mi más absoluto desprecio para aquellos que intentan imponer por la fuerza aquello que no consiguen mediante con la palabra.